domingo, 21 de agosto de 2011

LOS DESASTRES DE LA GUERRA

Los desastres de la guerra, una serie de 82 grabados sobre las crueldades de la Guerra de Independencia, ocurrida en España en el contexto de las Guerras Napoleónicas, son por un lado el súmmum litográfico y la madurez formal del Dibujo como técnica artística diferenciada de la Pintura (ya que hasta el momento éste se había encadenado a la ilustración de manuales de ciencias y de algunas obras literarias), por el otro lado, suponen también la mayor colección de imágenes de denuncia social y el más completo reportaje gráfico de una guerra hasta el momento.

Francisco de Goya no se amilana a la hora de mostrar los muertos amontonados, la gente pudriéndose viva por el hambre, los asesinatos y torturas, la obra es cruda y real, y por si eso no hubiese de ser suficiente para conmover a las generaciones futuras que lo observasen, además queda plasmado que fue contemplada por el autor directamente, sin ser imaginaciones ni reinterpretaciones propias de otros cuadros de guerra. El octubre de 1808, el general Palafox pidió a Goya que viajase de Madrid a Zaragoza, la ciudad que aguantó tres sitios franceses a costa de los miles de civiles que murieron defendiéndola, atravesando un país en guerra para retratar la resistencia heroica que habían comenzado allí, pero lo único que vio el pintor fue al pueblo desangrándose allí donde fuera. Eso es lo que rasgó de las planchas de metal para ilustrar en Los desastres de la Guerra.



El concierto para piano Los desastres de la guerra que he compuesto y que podéis escuchar en el vídeo de arriba [Los desastres de la guerra (GOYA) - Música de Félix Royo] vuelve la mirada a los inicios del siglo XIX a través de la identidad española más popular (Romanticismo e inicios del Nacionalismo), haciendo algo que le gustaba mucho a Beethoven (1770-1827) que es pedirle al piano no sólo lo más intimista sino también el fuego de toda una orquesta tocada a la vez en un único instrumento. Debido a esto en numerosos momentos el piano no será más que un vehículo para un fragor orquestal. Al mismo tiempo hay matices habituales en mi forma de componer como armónicos que se cruzan para dejar posos enarmónicos, notas sesgadas de forma percusiva, repeticiones que se convierten en variaciones, atomización de notas que atraviesan el silencio, etc.

El vídeo comienza con una ráfaga de imágenes lanzadas al cerebro para que tenga que reaccionar de forma similar a un espectador real, las mismas imágenes que ve el hombre arrodillado del primer grabado: "Tristes presentimientos de lo que ha de acontecer". A continuación pasan los grabados uno a uno con el tiempo justo para que la vista busque los puntos de fuga y de atención de la composición y se grabe así en la retina y que el cerebro lance de la memoria a corto plazo sus impresiones recién adquiridas. Intimismo; adentraos en las ilustraciones. Espero que lo disfrutéis a la vez que horroricéis.


Publicado también en OcioZero.com: Los desastres de la guerra

1 comentario:

  1. No lo había dicho antes pero poseo en mi haber un diploma a mi nombre que dice "Por tu activa participación en las actividades del 250 Aniversario del nacimiento de GOYA", enmarcado en la actividad organizada por el Gobierno de Aragón: "Goya y los escolares. Concurso de investigación sobre Goya y su época".
    http://www.encomix.es/~dga/goyaprem/escolar2.htm
    El emisor del diploma es el Colegio público "Río Ebro", en 1996.
    Cuando lo recibí (obviamente después de hacer una extensa monografía sobre Goya y otras actividades) tenía sólo diez años.

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